Friday, March 11, 2011

El estómago se quedó


Escuchaba Coldplay y bailaba en mi , no tenía ninguna precupación esa tarde. Era mi primer semestre en la universidad y estaba enamorada de la vida en Manhattan. Encontraba tantos nuevos amigos allí pero ese fin de semana viajaba para visitar a mi familia y mis mejores amigos en casa. Pues, tenía una cita en la peluquería antes de llegar a mi casa. Siempre iba al mismo hombre, se llamaba Kitch. Me gustaba sentarme en su silla cómoda y relejarme mientras hablábamos de la política o de las últimas modas o del tiempo. Su peluquería olía como menta fresca. No podría esperar para llegar a la tienda de Kitch ni para ver mi familia por primera vez desde mi salida a la universidad.

Bueno, la peluquería estaba en el centro de Overland Park, en la parte vieja y más peligrosa. Conducía en la calle ese día hermoso de otoño y llegaba felizmente delante del salón. Entonces, tenía que estacionar en retroceso. Traté y traté una y otra vez, pero no pude estacionar. Tres minutos pasaron. Cinco minutos pasaron. Dios mio, no pude aparcar. Estaba muy avergonzada.

Entonces, vi un hombre por la ventana que estaba cerca en la acera. Abrí la puerta y sonreí nerviosamente. El extraño me habló desde el bordillo.

-Hola. Mi coche está allí, detrás de tu carro. Tengo miedo de que vayas a chocar con mi carro. ¿Quieres que te ayude?

Mordí el labio y dije sí. En ese momento sentía tan verguënza, sólo quería estacionar e ir a mi cita.

-Gracias, señor. Sería maravilloso.

Por eso, yo fui y miré desde el camino mientras el hombre conducía mi coche. ¡De repente, se apresuró lejos en mi carro con mi bolsa y mi telféono móvil! No me había sentido tan enojada nunca. No pude llamar a mis padres. No me pude mover. Pensaba en el futuro oscuro: ¿Voy a comprar un coche nuevo? ¿Cómo voy a regresar a mi casa? Me perdí en una tormenta de pensamientos terribles. Las manos sudaron y mi corazón latió rápidamente.

Entonces, oí a algunas personas hablando afuera de un resaurante que no estaba lejos. Había dos hombres y una mujer que tenían trienta años, más o menos. Ellos se rieron, bebiendo sus cervezas y mirando en mi dirreción.

-Ese hombre es nuestro amigo- dijieron dulcemente -. No te preocupes, chica, él está de broma. Va a regresar pronto con tu coche. No es nada.

Todavía me sentí preocupada, por supuesto. Les di una sonrisa diminuta pero quería llorar. Quería caminar, correr, gritar. Quería hacer algo, pero no dije nada. Sólo podía esperar. Esperé al amigo de ellos.

Por fin, después de lo que pareció como eternidad, el hombre regresó y esacionó sin ningún problema. Todo estaba bien, pero mi corazón no latía más despacio. El hombre apagó el carro y abrió la puerta. Me dio las llaves y una expresión estúpida.

-Lo siento- me dijo con una risa torpe -. Eso no fue un chiste gracioso.

Puse mis llaves en la bolsa y dije:

-No, no es nada. Muchas gracias, señor. ¡Qué tenga buen día!

Caminé al otro lado de la calle y entré el salón de Kitch. No traje el estómago conmigo, porque se quedó al otro lado con mi carro. Estuve enojada y confundida por el resto del día…toda la próxima semana, realmente.

Aprendí mucho esa tarde en Overland Park. Todavía me encanta hablar con desconocidos, pero no me fío de las personas que no conozco. Cuando llegue a mi casa luego de esa noche, no hablé de mis experiencias horrasas con mis padres. Aunque todo estaba bien y tenía mi carro, dinero y móvil, estoy avergonzada. Aún hoy en día mis padres no saben todavía lo que pasó. Quizás les diré en los próximos años la historia de esa tarde terrible, cuando mi estómogo se quedó.

5 comments:

  1. ¡Oh Paige! Sabes que me gusta su cuento mucho. Como dijo Snra. Castillo, ¡es muy divertido! Eres una buena escritora, tambien. ¡Qué chévere!

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  2. ¡Qué chistoso! Me gusta su narración mucho, también. Es muy bien escrito.

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  3. ¡Ah! Este es una experiencia muy estresante. Me gustó leyendo su composición porque incluyes muchas detalles. ¡Gracias por compartiendo!

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  4. Me gusta su cuento mucho! Pienso que me gusta mas que la primera vez la leí. Eres una buen escritora; siente como yo estaba allí con tu y los otros. Buen trabajo!

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  5. Este es una de mis historias favoritas!!! Me divertí mucho al leerlo la primera vez y me sigo divirtiendo aún ahora! Está muy bien escrito y logras comunicar efectivamente las emociones y sentimientos del momento!!! Excelente trabajo! :0)

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