Thursday, March 24, 2011

Sorpresa inesperada por Dana Bahr


           Era un caluroso día de verano y estaba visitando a mis primos en Pennsylvania con mi familia más cercana. Ya habíamos estado en Pennsylvania por dos días y todo iba según nuestros planes. Ya habíamos visitado Philidelphia y habíamos comido los sándwiches famosos llamados bistec queso de Philly. También, habíamos viajado a la playa de New Jersey. Estaba feliz con mi vacación y esperaba que la vacación continuara siendo perfecta.
            En este día, me levanté en un estado emocionado. Hoy día, nosotros íbamos ir a un parque de atracciones. Este parque estaba localizado en Hershy, Pennsylvania y era conocido por su fábrica de los productos de chocolate. Había escuchado muchas cosas maravillosas acerca del parque de atracciones y me encantaba montar las montanas rusas. Mientras comía desayuno, leía el mapa del parque y marcaba las atracciones que quería hacer. Finalmente, nos subimos en el coche y fuimos a Hershy.
             Cuando llegamos al aparcamiento, rápidamente noté las atracciones altísimas, con descansos y vueltas. Mi corazón empezó a correr y estaba liso para divertirse. Después de unas atracciones simples, queríamos hacer una atracción emocionante, y entonces fuimos al fondo de una línea muy larga. Durante la espera, nubes empezaron a formar se en el cielo. Mientras estábamos más y más cerca de la puerta, a nubes estaban creciendo más y más grandes. Finalmente cuando éramos las próximas personas para montar la atracción, hicieron un anuncio  que el parque cerraba temporalmente porque empezaba a llover.
            Mi frustración explotó y no podía creer nuestras suertes. Luego, esperamos por mucho tiempo en la línea, pero la lluvia nunca cesó. Pero, continuamos esperando y esperando con la esperanza de que el parque abriría otra vez y podríamos disfrutar las atracciones buenísimas. Después de dos horas largas, decidimos dejar la línea, porque un trabajador nos dijo que estábamos gastando  nuestro tiempo. Los reportes mostraban que la lluvia no iba a parar. Fuimos a comer y encontramos nuestros padres. Sugirieron que visitáramos el museo de la fábrica de chocolates al otro lado de la calle.
            Cuando entramos al museo nuestras ropas estaban empapadas, mi espíritu estaba aplastado y solo quería regresar a la casa y ducharme. En el museo, habían muchas maquinas que estaban produciendo chocolate, y  videos fascinante con hechos sobre el chocolate. Había un parte del tour que parecía como la fábrica en la película, Willy Wonka. El museo ensenaba mucho, como de donde venían los ingredientes para el chocolate, y los trabajadores nos daban muestras libres de sus productos. La fábrica fue fantástica, pero no la aprecié porque estaba frustrada con el día.
            De pronto, descubrí que era la única persona que no estaba disfrutando el museo. Mi primos estaban haciendo chistes sobres sus cuerpos mojados, mis hermanos mayores estaban fascinados con los hechos del museo, y mi madre y tía estaban tomando fotografías, pero yo estaba deprimida. Decidí poner mi mal humor fuera y estuve ocupada en la conversación con mis primos. Empecé a aprender mucho sobre ellos y encontramos que teníamos mucho en común. Encontramos que compartíamos la misma apreciación por la película, “Zoolander,” y procedimos a citar la película por todo el tour.
            Cuando dejamos el museo mi actitud había cambiado cien y ochenta grados. La lluvia venía y venía, pero ahora no estaba triste porque había creado amigos nuevos en el museo. Salpicamos en el agua y reímos por todo el día. Me di cuenta nunca hubiera tenido esto si la lluvia no hubiera venido. En los últimos días de nuestras vacaciones, disfrutaba la compañía más que las actividades. Me gusté sándwiches de Philly, pero nunca pasó en esta vacación que apreciaba más que mi familia cariñoso. 

2 comments:

  1. Yumi!! Yumi!! Chocolate!!! :0) A veces no son los lugares sino las personas lo que hacen una ocasión especial!!! Buen trabajo!!! :0)

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  2. Un lugar solamente sobre chocolate, ¡que buenismo es eso! Me gustaría aprender más de la historia de chocolate despues de leyendo tú cuento...lo me interesaba mucho, especialmente el parte cuando tú dijiste que "Había un parte del tour que parecía como la fábrica en la película, Willy Wonka".¡Bien hecho!

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